Saber cómo maridar una cerveza, o qué comida va con cada estilo de cerveza, es importante tanto para los buenos cerveceros como para aquellos que aprecian la buena comida. Podés disfrutar plenamente tanto de la comida como de la cerveza con un maridaje que realce el aroma y el sabor.
Es fundamental el equilibrio para que los sabores y aromas de la cerveza no tapen a los de la comida, y viceversa.
Acá te damos algunos de los mejores maridajes con cerveza.
La cerveza Blonde es parte de la tradición belga y es una cerveza rubia de cuerpo medio y alta fermentación dominada por maltas ligeras y ésteres de levadura. Su perfil es maltoso, afrutado, ligeramente especiado con un final seco. No son muy fuertes, por lo que suelen ir bien con comidas moderadamente ligeras. Ensaladas, pescados a la plancha o pollo frito son buenos acompañantes de este tipo de cerveza. Salchichas con chucrut pueden ser buenas. Pero si hay algo que me encanta de estas cervezas es el queso. Acompaña bien quesos semiduros como Edam, Camembert y Gouda.
La cerveza Irish Red Ale es una cerveza de la tradición británica, de color cobre, de cuerpo medio, limpia, con aroma a caramelo; suave dulzor y tostado, con final seco. Combinan muy bien carne de vaca o cerdo a la parrilla o ahumadas, sobre todo cuando se les agrega salsa barbacoa; también con quesos suaves y postres con nueces, pasas y avellanas.
La India Pale Ale (IPA) famosa por su lupulado, lo que le da ese amargor característico, es de color ámbar, con aromas frutados, y un poco más de alcohol que las otras cervezas. Para maridar la IPA se recomienda hacerlo con hamburguesas, papas fritas, pescado frito, tacos mexicanos y mariscos. En general, comidas fuertes y condimentadas, y con quesos duros. También va perfecto con una tarta de manzanas con canela.
La Robust Porter es otra cerveza de tradición británica, que tiene sabor moderado a maltas tostadas y notas a chocolate. Su color es oscuro y de final seco. Queda muy bien con pastel de carne, carnes al horno, salsas barbacoas, y pescado a la parrilla. También con queso Cheddar o Azul.
En la cerveza Honey el lúpulo aporta aromas y sabores florales, algo picantes, pero sutiles sin enmascarar los aromas aportados por la miel. El nivel de amargor es bajo, predominando el dejo dulce en el paladar. Es una cerveza de cuerpo medio a pleno, color dorado intenso y con excepcionales aromas y sabores a miel. Se maridan muy bien con bondiola braseada, pollo, pan tostado con Foie o Roquefort, ensaladas con atún, y sobre todo con postres como el strudel de manzana.